MÉXICO DEL NORTE
Por JORGE MÚJICA MURIAS / MASEUAL
* Que El Último Apague la Luz
Chicago, Illinois, Estados Unidos de Norte America.- La noticia me recordó aquel viejo chiste del señor con cuatro hijos que no quería tener más porque escuchó que uno de cada cinco personas en el mundo era chino. Estos días, China tiene mil 357 millones de habitantes, 11 veces más que los 122 millones de mexicanos.
India, por su lado, tiene mil 252 millones, 10 veces más que México. No es de sorprender entonces la nota de que nuestro rancho ya no es el proveedor número uno de mano de obra para Estados Unidos. Desde 2013, aunque solamente ahora se publicaron los datos, entraron más inmigrantes chinos e hindúes a Estados Unidos, que mexicanos. Nuestro último año en el liderazgo de la exportación de personas al vecino del norte fue 2012, cuando entraron 125 mil mexicanos, seguidos por 124 mil chinos y 113 mil hindúes. En 2013 entraron 147 mil chinos, 129 mil hindúes, y nosotros nomás aportamos los mismos 125 mil paisas. Según el Censo de Estados Unidos, cuentan como inmigrantes quienes el año anterior vivían en otro país y vinieron con papeles o sin ellos.
Hace 15 años, en el 2000, exportamos la preciosa cantidad de 420 mil mexicanos al norte, pero para 2005 solamente entraron 369 mil en total, con y sin papeles. Los indocumentados que entraron en 2005 (que a saber cómo exactamente los cuentan) fueron supuestamente 161 mil, y para 2013 solamente 135 mil. Mirando otra estadística, la de las deportaciones en la frontera, bajaron de 1 millón en 2005, a “solamente” 229 mil el año pasado. No es exportemos menos porque ya haya salido de México el último migrante, porque todavía nadie ha apagado la luz, sino que ha habido cambios demográficos y más. La crisis económica le pegó feo a la construcción y la agricultura, típicas chambas “para mexicanos”, y los controles fronterizos se han reforzado más que nunca.
Más Legales y Mejor Pagados Claro, no todo está perdido. Nuestro continuo liderazgo durante varias décadas todavía se mantiene en los números totales. De todos los 41 millones de residentes de Estados Unidos nacidos en el extranjero, los mexicanos tenemos 11.6 millones, contra solamente 2 millones de hindúes y 1.8 de China. Con la tendencia a reproducirnos contínuamente, contra la de los chinos de hacerlo menos, seguiremos adelante por décadas.
Y nos podemos seguir regocijando en las cifras de nuestra mayoría aunque hayamos perdido el campeonato, pero hay otras cifras que molestan más.
Sucede que los hindúes, en su gran mayoría, vienen legalmente. De hecho, el 70 por ciento de todas las visas H-1B, para ocupaciones especializadas como técnicos de computación y los chinos se llevan un altísimo porcentaje de las visas a de estudiantes y de empleo calificado también, que a la larga se transforman en residentes permanentes y se traen, legalmente también, a sus familias. Los hindúes también se llevan el 30 por ciento de las visas L-1, para ejecutivos de empresas, y los chinos ocupan el 80 por ciento de las visas EB-5 de inversionistas. Para rematar, el 34 por ciento de las visas de asilo político se van también para los chinos.
Y ahí está el por qué de las propuestas de inmigración apoyadas, por ejemplo, por el creador y dueño de Facebook. Cada vez que se ha discutido una reforma migratoria, además de hablar de los indocumentados y cómo legalizarlos, se han incluido paquetes enteros de las otras visas, las de estudiantes, técnicos, inversionistas y demás. A estados Unidos, como país, le interesa más cómo mejorar la tecnología para no ser rebasados por China o la India o Japón o Brasil.
El chiste de todo esto es que México no promueve ninguna de todas estas cosas. Ni la educación tecnológica ni la inversión en el extranjero ni nada de nada. Seguimos siendo el país que no tiene ciudadanos de exportación altamente capacitados, sino solamente macuarros de la construcción, ergo albañiles y campesinos, sin ofender a nadie excepto al sistema… jmujicam@gmail.com