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Columna

PUNTO Y APARTE

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Por GUILLERMO CINTA / MASEUAL

* El “Cuau”: ¿Puros cuates?

* El “Morebús”: un proyecto

Cuernavaca, Morelos, México.-  1.- Cuauhtémoc Blanco Bravo puede respirar hondo, pero sin ausentarse por tiempo indefinido como lo hizo tras conseguir la victoria en las elecciones municipales celebradas el 7 de junio del presente año. Aquel domingo y en los días subsecuentes trascendieron las cifras que anunciaban el triunfo del ex futbolista; es decir, poco más de ocho mil electores lo colocaron muy por encima de su principal contendiente, la priísta Maricela Velázquez. Debido a que se encontraba en su luna de miel, a un representante del “Cuau” le fue entregada la constancia de mayoría por el Instituto Morelense de Procedimientos Electorales (Impepac), convirtiéndose en presidente municipal electo de Cuernavaca. Pero el PRI impugnó el proceso electivo, llevando el recurso hasta la Sala Regional del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (con sede en la Ciudad de México), donde ayer emanó humo blanco en esta etapa del conflicto postelectoral, confirmándose la victoria de Cuauhtémoc.

2.- A reserva de que usted encuentre más detalles en nuestra edición de hoy, le comentaré que dicha institución también ordenó al Impepac la aplicación de procedimientos administrativos en contra de los integrantes del Consejo Municipal de Cuernavaca, debido a “diversas irregularidades y falta de profesionalismo”, como cuando modificó el cómputo final y ordenó revocar la sentencia del Tribunal Electoral de Morelos (TEE) para efecto de que considerase las “pruebas técnicas” que el PRI aportó. Conclusión: la Sala Regional del TEPJF confirmó la victoria de Blanco Bravo por considerar que, a pesar de las diversas irregularidades cometidas por el Consejo Municipal Electoral, no se conjuntaron los elementos suficientes para anular la elección. Y asunto concluido… a menos que el PRI desee escalar el caso a la Sala Superior. Lo deseable es que de una vez por todas acepte la sentencia de los magistrados electorales asentados en el DF. Y que Cuauhtémoc Blanco Bravo comience a cumplir su responsabilidad histórica sobre la arena pública de Morelos, pues le esperan días aciagos.

3.- Antes de continuar con el asunto, pero dirigiendo el siguiente análisis al presidente municipal electo de nuestra capital, recordaré uno de los más importantes hechos políticos de que he sido testigo, inherente al estilo personal de gobernar. Como muchas veces lo he hecho, quiero recordar a Don Lauro Ortega situado en octubre de 1981, una vez que el PRI lo postuló como su candidato a la gubernatura morelense. El galeno de Xochitepec, quien fuera gobernador en el sexenio 1982-1988, se aisló varias semanas de quienes integrábamos el reducido grupo de sus amigos en Morelos. No supimos de él hasta que nos reunió en un salón del hotel Posada Jacarandas para definir la integración de la comisión de prensa y propaganda de la campaña, mecánica que operó en el resto de comisiones. La posición asumida entonces por Don Lauro impactó sobremanera a quienes nos sentíamos favorecidos con la postulación, sabedores de que nos la habíamos “jugado” con él.

4.- Fiel a su estilo, nos manifestó que todas las comisiones debían abrirse a la sociedad, a la universidad, a los colegios de profesionistas, a los clubes de servicio, a las organizaciones civiles, de empresarios, etcétera. Todo ello porque “no podemos conformar el gobierno de Morelos con puros cuates”. Nos dijo con la mayor claridad del mundo: “Ustedes deben estar seguros de que son mis amigos. Quien me quiera seguir, adelante, pero no puedo estructurar mi administración con puros amigos, ni compadres, ni cuates. ¡Hay que abrir el gobierno!”. Hasta aquí la remembranza en torno a un hombre que durante todo su sexenio se mantuvo sólido debido a la misma apertura. Espero que Cuauhtémoc Blanco adopte una actitud igual, en aras de mantener su sobrevivencia dentro de un ambiente tan conflictivo y corrompido como es el de la política. Hoy está copado por un grupo selecto de cuates, pero no podrá gobernar así. Esperemos para ver y después diremos.

5.- Cambiemos de frecuencia. El gobierno estatal busca recular ante lo que parece un error del secretario de Movilidad, Jorge Messeguer, al incentivar la inconformidad de transportistas y legisladores afirmando que ya existe una empresa ganadora de la licitación del Morebús. Mientras que la Federación Auténtica del Transporte de Dagoberto Rivera y Rutas Unidas que dirige Aurelio Carmona, analizan cómo reaccionar frente a lo que consideran un ataque del exsecretario de Gobierno, el subsecretario de Asesoría y Atención Social de la SMyT, Marino Martínez Román, dijo ayer que los transportistas deben conservar la tranquilidad porque al momento no existe un proyecto de Morebús, sino que la empresa referida por Messeguer hace unos días (Desarrollo, Tecnología y Planeación S.A. de C.V.), ha obtenido apenas el acceso a un contrato para elaborar el proyecto de viabilidad del Morebús, pero esto del nuevo sistema de transporte se tardará al menos unos 18 meses. Sin embargo, prendida la mecha entre los transportistas parece difícil que se apacigüen sin aspavientos. A ver.

6.- En la segunda parte del Foro regional sobre pago de derechos por el transporte público, organizado por la Comisión de Tránsito y Transporte del Congreso, ayer tomaron parte una serie de dirigentes del sector que acusan abusos gubernamentales y reclaman reducción en los pagos que por diversos derechos deben realizar. La Comisión es presidida por el perredista Ricardo Calvo y en el evento participaron también los coordinadores parlamentarios Hortencia Figueroa del PRD, Jesús Escamilla del Humanista y Alberto Martínez del PRI, entre otros legisladores. Se escucharon quejas y peticiones de ayuda que hablan de que los permisionarios y choferes del transporte público se sienten desatendidos y desprotegidos por parte de la autoridad, y con frecuencia objeto de acoso y abusos. Lo que no se dijo es que si las autoridades tienen mucho de criticable, del lado de los “líderes” transportistas también hay verdaderas fichitas. Apareció hasta la perredista Manuela Sánchez con el disfraz de dirigente de mujeres transportistas, cuando en este sector se habla mucho, y mal, del papel que jugó en la reciente entrega de miles de placas de taxi.

7.- Cuando en el Congreso fue instalada la Comisión de Desarrollo Agropecuario, hace cosa de un mes, dirigentes de diversas agrupaciones campesinas y de los llamados Sistema Producto se rebelaron por la imposición de alguien ajeno al sector en el cargo de Secretario Técnico de la Comisión, como consideran al abogado Ecliserio Linares. El sainete tuvo que atestiguarlo hasta el senador Fidel Demédicis, quien acudió en calidad de invitado especial y terminó mediando en el conflicto para convencer a los productores, quienes querían en ese cargo a uno de ellos, a alguien que hablara su mismo idioma. Desde la óptica de miembros del CAP, ese factor que parece menor ha impedido que líderes campesinos y miembros de esta comisión del Congreso logren acuerdos. Hay, por el contrario, una distancia entre diputados y dirigentes del sector agropecuario, lo cual ha propiciado enfrentamientos ríspidos en diversas reuniones y llevará la próxima semana a la toma del Palacio Legislativo para presionar respuestas sobre apoyo por siniestros y plagas y un mejor presupuesto para 2016. A ver.   gcmemocinta@gmail.com

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