SIN CORTAPISAS

Por PATRICIA CASTRO CEDILLO

* ¿Aquelarre electoral?

* Y la salud de la población ¿dónde queda?

Cuernavaca, Morelos, México, 10 de mayo de 2021.- “Mucho ruido y pocas nueces”. De esa manera se podrían catalogar las campañas electorales que realizan los aspirantes a ocupar algún cargo de elección popular, que en este 2021 se elegirán presidentes municipales y diputados locales en la entidad.

Lo más lamentable es que realizan sus caravanas, visitas a colonias de los diversos municipios, así como visitas domiciliarias tratando de convencer a los votantes; y digo lamentable porque realmente, en la mayoría de los casos, no existe una sana distancia, ni el uso correcto de cubrebocas ni muchos menos se les ve usando de manera constante su gel desinfectante.

Lo que sí es que los equipos de campaña de los candidatos van cargando sus banderitas, sus panfletos y calcomanías, haciendo partícipe a los ciudadanos de sus propuestas de campaña, utilizando mayormente el tema del agua potable y seguridad como como botín político.

Lo que sí es preocupante, es que personas comunes y corrientes, según han denunciado vecinos de diversas colonias, sin identificarse, van preguntando casa por casa si ahí vive tal o cual persona, proporcionando el nombre completo de éstas, y se dice preocupante porque no van con alguna insignia partidista, pero al preguntarle cómo obtuvieron los nombres, dicen que la copia del padrón electoral se los dieron sus candidatos y es cuando aseguran ser de tal o cual partido, empero sólo hasta que se les cuestiona y no teniendo certeza de que así sea.

Luego entonces, tanto el Impepac (Instituto Morelense de Procesos Electorales y Participación Ciudadana) como el INE (Instituto Nacional Electoral) deben informar a la población si eso es válido; ahora bien, cómo se garantiza de que en caso de que se legal, los candidatos no hayan sacado copias al por mayor de dicho padrón y ande éste en manos de personas, que quién sabe de dónde salieron y por qué tienen esa facultad de tener ese documento que es y debe ser privado.

En este sentido, fueron vecinos de la colonia Lomas de San Antón, en la ciudad capital, lo que han señalado que son entre 4 a 6 señoras las que andan haciendo eso y al cuestionarlas eso responden, por lo que los denunciantes -que prefirieron guardar el anonimato- temen que ese padrón sea mal utilizado y por qué no, hasta sea utilizando para la comisión de algún delito.

De ahí que se hace el llamado a los órganos electorales para que constaten, verifiquen, supervisen y demás, el uso que se le está dando al padrón electoral porque, dicho sea de paso, pese a que las personas en comento han acudido hasta en tres ocasiones en diversos días, a ese lugar donde se denuncia -se reserva la calle y/o privada- no ha acudido candidato alguno a realizar campaña.

Pero bueno, ya corresponderá a las autoridades informar si eso es legal y si lo es, qué garantía hay de que no hagan mal uso de ese documento que contiene todo lo relativo a los ciudadanos.

Ahora bien, también se hace necesario obligar a los candidatos a cumplir con el confinamiento; ¿en verdad creen el Impepac y el INE que hacen sus campañas cuidando la salud de quienes los acompañan? Eso resulta una falacia vil, ya que basta ver los videos que publican en redes sociales para dar cuenta de que les importa más pregonar y ensalzarse como los “gallos”, los “justos”, los “yo sí voy a trabajar en su beneficio” que llevarles beneficios sociales fehacientes.

Por qué no acompañan sus recorridos, repartiendo cubrebocas, gel, oxímetro, desinfectantes, pero no, sólo continúan los “baños de pueblo” y el tomarse la foto para darse por servidos. No se duda, se aclara, que haya buenos candidatos, pero primero es lo primero y esto es, la salud de la población.

Hay que recordar que el Covid también es asintomático y ahí andan las comitivas electorales repartiendo sonrisas, abrazos y falsas promesas con el riesgo latente de que contagien a alguna persona que sí se resguarda en sus viviendas, ignorando tal vez sean portadores del virus.

Por qué no obligaron las autoridades electorales a que se realizaran las campañas de manera virtual, por qué se empecinan o permiten que los candidatos y sus séquitos anden como si nada haciendo su labor de convencimiento sin que exista certeza de que no tengan o hayan padecido coronavirus.

Recordar que el semáforo amarillo no es sinónimo de que las cosas marchen bien en la entidad; no significa que ya las personas sean inmunes, pero bueno, tal parece que en la política todo se vale y el bendito semáforo seguirá siendo a modo, de acuerdo a los intereses políticos de quienes gobiernan. Tiempo pues, para ver si repuntan los casos o sí se siguieron los protocolos sanitarios de manera correcta.