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Columna

TIERRA CAÑERA

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Por HUGO BARBERI / MASEUAL

*  Ola de robos y asaltos en el Sur de Morelos

 Pura caña

Jojutla, Morelos, México.-  El problema no tiene días, no tiene semanas o meses. Hace más de un año se registró una ola de asaltos a mano armada y robos a casas habitación en la colonia Gabriel Tepepa del centro de Tlaquiltenango. Eran los inicios de la administración graquista, precisamente cuando asesinaron a un excandidato panista, de nombre Ignacio, cuyo crimen permanece impune y sin esclarecimiento.

Meses después del artero asesinato de “Nacho”, como lo conocían sus amigos y familiares, sus vecinos fueron víctimas de robos constantes en sus viviendas, algunas de ellas fueron vaciadas literalmente de muebles. Supuestamente el Mando Único (MU) realizaría operativos “tácticos”, pero la situación continuó y ante la desesperación, los vecinos se organizaron por cuadras y barrios de la colonia. Instalaron lonas y mantas amenazantes contra los ladrones, quienes ya tenían la advertencia de ser linchados, tomaron acciones definitivas como la poda de árboles donde suelen esconderse, pero también exigir mayor alumbrado al ayuntamiento y esto bajó.

Sin embargo, comentan los mismos vecinos que a pesar de que no se reporta el alto índice de robos y asaltos, el problema sigue, con menos casos pero continúa, como la misma negligencia de la policía.

Meses después, el problema se trasladó a Zacatepec, donde los vecinos del centro han tenido reuniones con la policía, quien les regresa la “bolita” y los responsabiliza, señalan, por lo que también ya se escuchan voces que advierten de hacer justicia por propia mano.

Como en los peores tiempos del condenado fascismo, se reportaban diversos robos y actos de vandalismo en las escuelas adjuntas o frente a las instalaciones de la policía en la cabecera, pero en vez de enfrentar el problema, lo que hizo el MU, que liderea Jesús Albarto Capella Ibarra, fue quitar esa comandancia.

Ahora la violencia de los robos parece que se dirige contra el gremio periodista, el sábado anterior se cumplieron 3 semanas que con pistola en mano se obligó a la pareja de mi compañero Marco, a plena luz del día y en su propio domicilio, a que endosara documentos de su vehículo. Pese al reporte inmediato y a que hay una cámara de vigilancia en la única entrada y salida del conjunto habitacional donde se efectuó el robo, es la fecha que no se sabe ni qué rumbo tomaron los delincuentes. En la “procuración” de justicia el acta se levantó 5 horas después y no se reporta ningún avance.

El pasado 27 de noviembre, otro comunicador, Moisés Ocampo Trujillo, reportó el robo de su vehículo en la colonia Otilio Montaño de Tlaltizapan, ubicada en el área limítrofe con Zacatepec. Fuentes confirmaron que el sábado anterior encontró el vehículo en Zacatepec.

Pero no quedó en eso, el pasado viernes, la compañera, Angelina Albarrán Morales, también padeció el robo de su vehículo. Ella misma comenta la odisea que ha representado:

Por lo menos 5 horas vitales se pierden para iniciar una carpeta de investigación en la fiscalía de la zona sur por robo de vehículo, para finalmente darte cuenta que por esta vía no podrás más que engrosar las cifras oficiales de robos y la impunidad contra la delincuencia cuyas cifras solo en el sur del estado de Morelos es de al menos 5 vehículos robados por semana.

Desde las 4 de la tarde ya había fila para poder iniciar una carpeta de investigación en el ministerio público, que por cierto desde hace unas semanas ya está ubicado en el edificio de la Fiscalía Regional de la zona sur y poniente del estado, conformada por al menos 10 municipios, y donde se aglomera el trabajo que en un reducido cubículo. Atienden en 3 mesas un solo agente con sus respectivos auxiliares, que igual y contraviniendo el nuevo marco normativo de la justicia penal adversarial “asesoran” a imputados y denunciantes como cuadrar mejor su declaración.

Fue hasta después de las 18:30 que finalmente se dignan los funcionarios de esta fiscalía a iniciar la carpeta de investigación por el robo de la camioneta de mi propiedad.

Nunca se me dijo pero quedó asentada, incluso mi consentimiento, mi declaración podría ser grabada.

Tampoco se me dijo que se asignaban como asesor jurídico al licenciado José Julián Castro, quien por cierto fue el MP que escribió lo que se asentó en la carpeta de investigación JO-UER/2895/2015, pero quien hábilmente sustrajo de los documentos que presenté para acreditar la propiedad como la serie IN6SD11S8PC373974, cuyas placas de circulación son NW73878 del estado de Morelos. Como sea quedó asentada la denuncia. El siguiente paso fue trasladarse (ella misma, el mismo denunciante tiene que hacerlo) a dejar la orden de investigación a la Policía Ministerial de esta fiscalía, ubicada en otro extremo de la cabecera municipal de Jojutla, donde nuevamente había que esperar turno. Y es que de todo el equipo que hay solo sirve una computadora, y donde entre chascarrillo, recepción de evidencias de otras investigaciones, los elementos tratan de hacer menos pesado el tiempo y las limitaciones que enfrentan para hacer su trabajo. Ahí de plano nos enteramos que ni vehículos, ni otro tipo de recursos “$” tienen para hacer su trabajo, pero aseguran que lo hacen, será por eso que ya hay un importante rezago en este nuevo proceso de justicia que prometía ser más ágil y menos burocrático.

Y para “consuelo” me dijeron esas camionetitas son muy cotizadas, a estas horas ya debe estar por “Filo de Caballo” en el vecino estado de Guerrero. Se trata de una camioneta Nissan pick up modelo 93, color gris plata, esa que en el medallón tiene una vieja calcomanía de “Yo leo el Sol de Cuernavaca” en la que me han visto, con varios de mis compañeros periodistas por casi 10 años, si se trata de una de las herramientas de trabajo, importante para el desarrollo de nuestro trabajo como comunicadores, y tan indispensable dada la distancia que hay entre las comunidades y los municipios. Por casi 2 años, y como rutina lo reconozco, acostumbré dejarla estacionada sobre la calle Allende, ubicada entre el bulevar 18 de Marzo y la calle 5 de Febrero, muy cerca de la Cabeza de Juárez y de la Plaza Yuliana, donde están las oficinas del Sol de Cuernavaca en Jojutla, espacio donde está un taller de herrería de Sámano, la veterinaria “Mundo Animal” y un establecimiento de fertilizantes, es decir, una vía muy transitada. Pero de donde se la llevaron entre las 11:30 y 14:30 horas. Y el viernes no fue la excepción, ahí la dejó estacionada el compañero periodista y escritor, Edilberto Nava García, a quien le pedí que me apoyará ese día para dejarla estacionada donde acostumbro, ya que por un compromiso de trabajo me fui en el vehiculó de otra amiga a la capital del estado a las oficinas del Sol en Cuernavaca y pretendía llegar a Jojutla, al curso taller que se empezó el jueves, sobre las bases jurídicas de Periodismo del Sistema de Justicia Penal que imparte en Jojutla la Secretaria de Gobierno del Estado de Morelos.

La noticia no sólo me obligó a regresar antes de Cuernavaca, con el apoyo de mi comadre Micaela Bocanegra, con quien lamentamos que resulta altamente sospechoso que la delincuencia se está ensañando contra los periodistas, primero el singular robo de la camioneta jeep de la compañera de Marco Baberi Rico, quien la estaba vendiendo y los despojaron con todo y documentos. Y en la madrugada del jueves, el robo del auto de Moisés Ocampo Trujillo quien fue camarógrafo en el canal 22 y en este trienio trabajaba en el departamento de comunicación del municipio de Tlaquiltenango, se trata de un Nissan, Tsuro II modelo 90, color azul marino, placas PWK-40-00 y con un grafiti e Blue Demon en el cofre.

 Y es que entre las voces de pasillo de la fiscalía, se advirtió que están recibiendo por lo menos 5 denuncia de robo de vehículos. Pese que dirían que por mes, y mi sorpresa fue que es por semana. Lo peor del caso es que nada pueden hacer para frenar esta ola delictiva, ya que eso compete a la desaparecida policía preventiva de los municipios, ahora MU y la gran mayoría de casos siguen sin resolverse.

 

Pura caña

Siguen los desacuerdos y hasta enfrentamientos por la denunciada “reforma punitiva” o educativa, de la que se deriva la evaluación a los profesores. Ayer se reportó un connato de enfrentamiento de inconformes con policías en el Tecnológico de Zacatepec. Dentro, en la evaluación hubo discusiones por la falta de preparación, también en la Universidad Tecnológica Emiliano Zapata. Aquí el reporte que dio para La Jornada Morelos, un pofesor: En el segundo examen no habría la plataforma. los representantes del Ceneval y del INEE desconocían que debían Imprimir unas contraseñas nuevas. Creo que no estaban enterados. Empezamos una hora después. Posteriormente se fue el Internet y todo lo que pasaba, alguna incidencia tenían que comunicarse a México con Álvarez Retana. Para que les solucionará sus dudas. No hay organización, ni prestación para los aplicadores. Algunas preguntas son erróneas. A un grupo de compañeros los sacaron de las aulas por que no tienen acceso a la plataforma. Según el examen empezaba a las 10 y estamos aquí desde las 9am. Hubo discusiones, reclamos… A pesar de todo: ¡¡SALUD!!…jornadaenjojutla@hotmail.com  Tw: @hugobarberirico 

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