POR LA LIBRE 2995
Por IGNACIO CORTÉS MORALES / MASEUAL
- Los bombardeos sobre el mundo
- Avándaro
- Asentamientos
- La farsa tri
Cuernavaca, Morelos, México, 12 de septiembre de 2021.- 1.- Repetido una y mil veces cuando aviones se estrellaron en los pisos altos de las torres gemelas y, a las pocas horas se derrumbaron sin explicación lógica; tampoco tuvo el que se fraguara una acción tan bien organizada sin que ninguno de los cuerpos de inteligencia gringos se enterara de nada; es más, a 20 años poco se sabe, más que se dio el pretexto para invadir Afganistán, en una guerra que perdieron los estadounidenses, lo que ya viene siendo la costumbre; sucedió en Corea, en Vietnam y otras criminales acciones a lo largo y ancho del planeta, de donde se salió huyendo o disfrazando su fracaso con la firma de tratados en los que han tenido que aceptar los términos para no hacer más el ridículo ante los ojos del mundo. Dejaron la muerte por doquier.
Veo los vídeos de lo que sucedió el 11 de septiembre del 2001 en New York, el miedo, la angustia, la muerte, pero no vi ningún vídeo de los efectos que dejaron las bombas de Hiroshima y Nagasaki; ni tampoco el nápalm sobre los campos de Vietnam, ni ninguno de los impactos sobre Bagdad, Afganistán, Corea, Panamá y tantos lugares más a los que invadieron para apoderarse de sus riquezas naturales y/o su sitio estratégico para vigilar al que llaman enemigo, desde su óptica convenenciera, asesina y sin dejo de ética
Cuando las bombas, misiles y demás envíos de muerte se estrellan contra los iraquíes los talibanes, los japoneses, sirios, vietnamitas, también hay crisis, casos, asesinatos de niños, mujeres, ancianos, y también los bomberos, las ambulancias, los rostros llenos de angustia y lágrimas, carreras con los hijos en brazos, muriéndose, desangrándose, pero pareciera que se olvida y sólo son los aviones estrellándose en las torres y personas al vacío cuando el fuego lo tuvieron a dos centímetros, y desde luego que impacta, y no es plausible, son seres humanos que, sin deberla, son marcados de por vida por este hecho.
¿Ya se les olvidó la niña vietnamita huyendo del nápalm?, ¿el niño japonés que traía a la espalda a su hermano asesinado por bomba del seis o nueve de agosto del 45?.
A ese niño se le preguntó si no le pesaba, que ya estaba muerto el niño que llevaba, y respondió: “él no es una carga, él es mi hermano”. Así, desgarrador el relato sobre tal crueldad, de esa rudeza innecesaria. El gobierno gringo quiso amenazar al mundo que tenía esa arma para lo que se ofreciera, para amedrentar en esta estúpida carrera bélica.
Fue el gobierno gringo el que apoyó a Videla, Strósner, Hugo Bánzer, Batista y una larga lista de sátrapas como Rafael Leónidas Trujillo, Pinochet que llegó al poder el 11 de septiembre de 1973, tras de asesinar no sólo a Allende, sino ser copartícipe de los crímenes sobre Víctor Jara y miles de chilenos que querían una patria libre y de todos.
Pablo Neruda también murió por esas fechas, con esa operación Cóndor, y nunca gesto de remordimiento de quien no tiene amigos, sino intereses y sus manos llenas de sangre.
Que ahora que regresaron los talibanes quién sabe qué la pasarán las mujeres, como si hubieran estado a salvo con los gringos con libertad absoluta para hacer lo que quisieran sobre los países invadidos. Faltos de memoria, hipócritas, mercenarios, ceñidos a sus patrones que les dictan lo que deben decir, siempre a favor de los gringos.
Hasta a sus presidentes asesinan, les arrancan los valores a sus jóvenes y los abastecen de droga, les ponen armas en las manos para que se maten, los explotan y asesinan.
Aplaudamos a estos gobiernos de asesinos, cómplices, ciegos, infames, ladrones y más.
No los olvidamos, ni nos olvidamos de sus acciones; recordaremos una a una y lo van a pagar al paso de los años porque nada puede quedar impune a perpetuidad.
2.- El 11 y 12 de septiembre del 1971 en Avándaro, festival de música y libertad que los medios de la época no se cansaron de atacar con saña. Su intolerancia es contumaz.
3.- Asentamientos irregulares como los de Tlayacapan, del cerro del Chiquihuite y otros, alguien los permitió; las construcciones lo atestiguan. Están en su casa tranquilos.
4.- La farsa del tri-Morelos hoy sigue; se registra Jónathan Márquez para proseguir ahí.