POR LA LIBRE 3108
Por IGNACIO CORTÉS MORALES / MASEUAL
1.- Ojeda y sus demonios
2.- Apagones
3.- Educación
4.- El presupuesto del 2022
Cuernavaca, Morelos, México, 5 de diciembre de 2021.- 1.- César Raúl Ojeda llega a la entidad para atender funciones de dirigente estatal del morenismo, ante la inoperancia de Gerardo Albarrán, excelente persona y gran conversador, pero sin dotes de liderazgo, y menos si la segunda del barco es Ariadna Barrera, por lo que los triunfos del partido se dieron por el Lopezobradorismo y por las figuras que en algunos lados se tienen, como Rafa Reyes en Jiutepec, en Jojutla Juan Ángel Flores, y algún otro por ahí, pero no por el trabajo de la dirigencia estatal diera las directrices a seguir.
Cuando se presentó a mítines Albarrán fue por no dejar, no porque tuviera el mando. Varias candidaturas se fraguaron a nivel nacional y no hubo grandes protestas.
Sobre algún candidato, la dirigencia estatal se hizo pata ante militantes que se fueron descaradamente a defender al blanquiazul y su candidato; nunca llamó al orden ni a la disciplina partidista; se hizo la ofendida ante algunas imposiciones y se automarginó; tácitamente renunció al respaldo no sólo con presencia sino que no quiso entregar la parte de prerrogativas que se requirieron en el caso de las alianzas, en un desafío que se debió corregir, en su oportunidad desde el centro, pero Mario Delgado lo dejó pasar.
En el centro nada y en la entidad, menos, cada quien hizo lo que quiso, como quiso y si quiso; nunca una orden general, una disposición, una directriz, y la dirigencia nunca hizo el menor llamado de atención; lo mismo siguió en los meses postelectorales, hasta que se decidieron a enviar a Raúl Ojeda, tres veces perdedor en igual número de contiendas en la búsqueda por la gubernatura de Tabasco, y quien estaba retirado, pero de pronto le salió el morenista que todo aspirante a puestos importantes dentro de la política tiene, y se afilió al partido, no se le hizo ni gobernación ni suplir al jefe del ejecutivo en su natal entidad, pero alguien recordó que parte de su familia vivía en el territorio zapatista, que su mujer estuvo en el gobierno de Graco, y que lo envían a las bellas tierras tan mal gobernadas desde 1994, y no sólo para poner orden en Morena, sino en dictar una conducta de trabajo al Cuauh, quien no sólo apareció en un partido de fútbol, al lado del embajador de Qatar en México, sino en distintos eventos a lo largo de la semana, para berrinche de quienes aseguraban que se iría volando, pero no, finalizará sus seis años y seguirá en la política el próximo sexenio, tal vez en el deporte nacional.
Que Ojeda conozca a Graco, es un hecho, paisanos, en la política, la señora María del Carmen Linares fue parte de las funcionarias del tabasqueño en su administración, pero no sé qué tanta es su amistad, ni qué tanto pudiera influir en él para pedirle consejos.
Sus derrotas electorales en Tabasco y esta situación con Graco pudieran ser demonios en su accionar, pero vamos a esperar a ver por dónde camina, si llama a los amorfos para pedirles cuentas o consejos para que se vaya a la derecha el partido, si atiende a Ale Flores para ser la dirigente estatal y enterrar al partido, si obedecerá a Mario Delgado, quien es metiche, sin importar si beneficia o perjudica al partido, con las imposiciones que tendrá para la tierra tlahuica, a la que mira como sitio de conquista.
Por lo pronto el PAN, PRI y Morena tienen como dirigentes a perdedores en las urnas.
2.- Dos noches, sendos apagones en la capital. Por favor den mantenimiento a las líneas.
3.- Delfina Gómez estuvo en Jiutepec este viernes, con escasísima difusión, con todo y que la educación es asunto trascendente, y donde se esperaba que la ex profesora de banquillo hablara de las escuelas de tiempo completo, si se quedaba o se iba a buscar la gubernatura mexiquense, y, de Morelos, si sabe que sigue el inoperante Chabelo Téllez.
4.- El presupuesto 2022 y el tema de la ESAF serán de amplio debate en el congreso local, y se espera que los morenistas se mantengan unidos. Se saber de uno que si le truena los dedos El Jefe, pudiera salir corriendo para obedecerlo, ya después buscará un pretexto para justificarse. Tania está firme, pero ¿Érika Hernández y Mirna, también?.