DENUNCIAN NEGLIGENCIA EN EL HOSPITAL MEANA DE JOJUTLA

Por HUGO BARBERI RICO / MASEUAL

Jojutla, Morelos, México, 28 de mayo de 2023.- Tras la muerte de su bebé al nacer, el padre identificado como Jeisson Sotelo Rodríguez, denunció negligencia contra médicos del hospital general “Dr. Ernesto Meana San Román” de este municipio, ya que les advirtió con un ultrasonido que su hijo venía con el cordón enredado y presentaba problema, cuando quisieron actuar ya fue tarde y nació muerto.
Entrevistado afuera del nosocomio ubicado en la entrada oeste de la cabecera jojutlense, Sotelo Rodríguez, manifestó su inconformidad:
“… fecha de parto era el 17 de mayo, vea la fecha en la que estamos y veníamos y la regresaban, la revisaban supuestamente cada tercer día, venía y la regresaban… que todavía no estaba, que mi bebé no bajaba… todavía no estaba en el proceso”.
Explicó que preocupado por la situación, buscó realizarle por cuenta propia un ultrasonido y “…la enfermera que es especialista en ultrasonidos, nos dijo que mi bebé venía enredado en el cordón, doble y le dio una hoja (a su esposa) y le dijo tienes que ir al (hospital) Meana, porque tu cesárea ya está programada y si no se te va a pasar el tiempo”.
Sin embargo, ya en el hospital Meana, “vino y le dijeron que todavía no, que no le podían hacer anda porque no estaban seguros y se fueron y en la tarde mi esposa se empezó a sentir mal, ya no se empezó a menear mi bebé”, fueron de urgencia al hospital, donde la metieron al quirófano y a la media hora les avisaron que el bebé había perdido la vida.
“Quiero pedir justicia”, sostuvo categórico.
En más, Jeisson Sotelo, afirmó que su esposa ya tenía 24 horas en el hospital “y todavía no le pueden sacar al bebé, que porque el ginecólogo le está diciendo que lo debe de tener normal, pero que no lo puede tener normal porque viene enredado mi bebé”.
Tanto el entrevistado como su familia y la familia de su esposa permanecen afuera de las instalaciones del hospital. Salió Martina Rodríguez Ávila, quien manifestó que su nuera estaba sufriendo “demasiado”, se quejaba del dolor y que ella misma le pidió al médico que ya le hicieran la cesárea, pero que le contestaron que no, porque era muy peligroso, con lágrimas en los ojos narró que le insistió al médico que lo hiciera: “…mi nieto ya está muerto, qué está usted esperando… pobrecita, se queja de los dolores… ya teníamos un mes, veníamos a consulta y (decían) está bien su bebé, váyase, cada tercer día…”