Desfiguros panistas
Por EDILBERTO NAVA GARCÍA
Chilpanciingo, Guerrero, México, 26 de agosto de 2021.- De un tiempo acá, en materia de información la gente confía más en las redes sociales que en la radio y la televisión tradicionales. Y precisamente por las redes sociales me entero del cinismo de Ricardo Anaya, ex candidato panista a la presidencia de la República. De buenas a primeras culpa a Andrés Manuel López Obrador, de persecución política y aduce que el presidente quiere impedirle que sea nuevamente candidato presidencial.
De verdad, Ricardo Anaya muestra una actitud tan corriente para mostrar el cobre. Con toda seguridad muchos de los ciudadanos y particularmente los propios panistas recuerdan como tramposamente se hizo de la candidatura presidencial, para lo cual no le importaron los medios. A empujones y eliminando adversarios en su propio partido, quienes bien pronto le restregaron en la cara su agandalle para hacerse de millones de pesos en su actuación política. Según las evidencias, Ricardo Anaya está involucrado en sucios juegos en el que manipularon dinero público.
Ahora anuncia que se exilia, en claro afán de ponerse fuera del alcance de la acción de la justicia. Están los señalamientos de Javier Lozano, ex panista y de un ex secretario de hacienda. Su audacia lo llevó a sus vídeos. El habilidoso Anaya logra dos objetivos: publicidad y su conversión a víctima; pero no calculó la posibilidad de que su acción resultase contraproducente. Así que del viernes anterior a esta semana, la pantalla se le desconfiguró. AMLO tiene ahora mucha audiencia precisamente por la credibilidad de que goza, y como no está mudo, le respondió con toda oportunidad.
Ahí están los vídeos y las denuncias en la ahora Fiscalía General de la República que lo cita a comparecer para que aclare la situación de su patrimonio considerado malhabido. Y en efecto, no hay necesidad de poner tierra, ni mar ni aire de por medio para resolver su situación jurídica. Si Anaya huye, también resultará contraproducente, pues Ricardo ya ve la situación del ex de Pemex. Huyó, se escondió, pero más pronto que tarde fue hallado.
Su partido el PAN está en crisis. No está sólo en tal situación, pues el PRI atraviesa por situación aún peor. Del PRD, quizá ya convenga no considerarlo partido político, sino simple asociación chuchista de acción electorera.
Y es de comprender que para al menos un centenar de actores políticos, el actual régimen tiene un tinte dictatorial. Por sus altos intereses, esa es su visión, pero para el pueblo, integrado por millones de mexicanos, el actual presidente está actuando mucho mejor que los anteriores en varios sexenios. Quienes se sienten afectados, ni haciendo de tripas corazón son capaces de reconocer. Para los sensatos, no tan corruptos, quizá sólo sea cuestión de adaptación en el actual régimen, pues otros se obligan a responder ante la justicia por los desfalcos al erario público y otros entuertos.