PUNTO Y APARTE
GUILLERMO CINTA / MASEUAL
23 / Febrero / 2016
* DEUDAS Y NEGOCIOS
Cuernavaca, Morelos, México.- 1.- El alcalde de Cuernavaca, Cuauhtémoc Blanco Bravo, parece estar más preocupado por vestir la casaca del América contra Monarcas Morelia el 5 de marzo venidero (en el Azteca), que en resolver la gravísima deuda municipal. El ex futbolista ya admitió la quiebra técnica del Ayuntamiento, donde está cediendo las más importantes decisiones a los hermanos Julio y Roberto Yáñez Moreno, diputado local pesedista y secretario general de la comuna, respectivamente. Es fácil deducir porqué: Blanco es un completo ignorante con respecto a la administración pública. Así las cosas, en los asuntos que Roberto Yáñez ingresará este viernes a la sesión de Cabildo pretende lograr el beneplácito de los concejales para proceder al pago de algunas deudas heredadas por Jorge Morales Barud, lo cual debe conocer a plenitud el coordinador de asesores del “Cuau”, Enrique Paredes Sotelo, pues todos los casos pasaron por su oficina, primero en el área jurídica del Ayuntamiento y luego en la Secretaría General.
2.- Los más espinosos expedientes fueron ventilados en ámbitos del Tribunal Contencioso Administrativo -después denominado Tribunal de Justicia Administrativa- por los ex síndicos municipales Fernando Martínez Cué y Leandro Vique Salazar. Ante la reiterada falta de pago y la presunta insolvencia económica de la administración, hubo proveedores y contratistas que demandaron ante esa demarcación jurisdiccional… ganando los juicios. Cuauhtémoc Blanco y compinches no pueden decirse sorprendidos, pues oportunamente conocieron el listado de deudas “institucionales” y litigios transferidos a la actual administración. Como era de esperarse, la actual síndico Denisse Arizmendi tiene la “papa caliente” del endeudamiento en sus manos, las cuales podrían causar una profunda crisis de gobernabilidad y otra de carácter financiero. O paga, o paga la comuna, es la conclusión a partir de las sentencias que el viernes introducirá Yáñez Moreno al Cabildo.
3.- Empero, dentro del apuro para liquidar estaría la “mano negra” de Roberto Yáñez Moreno y su hermano Julio. Desglosemos. Una de las empresas que más figura en la lista de casos a tratar el viernes es LMA Arquitectos, S.A. de C.V., cuyo corporativo se encuentra en Puebla y es propiedad de Luis Gabriel Mejía Alatriste, a quien se le deben poco más de 10 millones de pesos. Y también está enlistada la empresa Cosmos Construcción y Agregados S.A. de C.V., de capital poblano y que presuntamente tiene en el ex gobernador y ex alcalde cuernavacense Sergio Estrada Cajigal a un magnífico representante y socio. Cosmos es la constructora que “regaló” el tan cacareado reencarpetamiento aplicado hace poco en varias calles de Cuernavaca, pero qué cree usted: se le adeudan casi 18 millones de pesos, tan solo por la venta de alguna emulsión contenida en el asfalto colocado durante la gestión de Morales Barud.
4.- Es importante subrayar que la deuda original con Cosmos ascendía a 8 millones de pesos, pero llegó a más de 17 debido a la pésima conducción jurídica en tiempos de los síndicos Martínez Cué y Vique Salazar. Tocante a Cosmos, desde mi particular visión no hay ninguna generosidad al “donar” el reencarpetado de calles. No. Las obras que tanto presume Blanco Bravo podrían ser una “comisión” a cambio del pago de deuda. Sin embargo, esa empresa y el grupo político donde están insertados Estrada Cajigal y los hermanos Yáñez Moreno no son hermanas de la caridad; vienen por más apoyados por politicastros poblanos entre quienes destaca el gobernador Moreno Valle. A ver. Y en más con relación a la administración del “Cuau” repetiré lo que es un secreto a voces en el Ayuntamiento cuernavacense: el diputado Julio Yáñez Moreno y Juan José Alcalá Ortega, secretario de Desarrollo Sustentable y Servicios Públicos, promueven la construcción de un nuevo desarrollo comercial sobre la calle González Bocanegra y Boulevard Benito Juárez. El trascendido indica que Alcalá compró un inmueble sobre González Bocanegra, pero le falta “convencer” a Emilio Franco, propietario del restaurante “México Lindo”, para que venda su terreno, sito en la envidiable esquina de dicha calle y la avenida Benito Juárez. El conocido turistero se ha negado a vender, ante lo cual ya comenzó a ser presionado (¿extorsionado?), de alguna forma u otra. O vendes, o vendes, es la consigna de Alcalá y Julio Yáñez Moreno. A ver. “Business are business”.
5.- Cambiemos de frecuencia. Al rector Alejandro Vera seguramente le zumbaron los oídos durante toda la mañana de ayer. Resulta que la Comisión de Puntos Constitucionales y Legislación a cargo de Enrique Laffitte, y el IMIPE que preside Mireya Arteaga, se reunieron para analizar una nueva ley sobre transparencia, y en el evento el rector de la UAEM resultó ser la comidilla. Congreso e IMIPE se lanzaron a la yugular del jefazo universitario por haber solicitado el amparo de la justicia federal para evadir la obligación de transparentar los ingresos que tienen los empleados de la máxima casa de estudios, habida cuenta de que quienes manejan recursos públicos están obligados a acatar el principio de máxima publicidad, la transparencia y la rendición de cuentas. Los argumentos de Vera para ocultar datos se han expuesto con insistencia, pero es evidente que pierden peso en tiempos donde la honestidad universitaria se pone en duda desde la mismísima Auditoría Superior de la Federación.