CRÍTICA VISIONARIA

Por MÓNICA BASURTO RESÉNDIZ/ MASEUAL

• * Seprac ¿en el ojo del huracán?

Cuernavaca, Morelos, México, 8 de diciembre del 2025.- Gran revuelo ha causado la supuesta imposición de apoyo obligatorio o cooperación forzosa, como quieran llamarle, a elementos policiacos para celebrar el Día del Policía, donde en redes sociales acusan de tal acción, tanto al titular de la Secretaría de Protección y Auxilio Ciudadano de Cuernavaca (Seprac), Guillermo García Delgado como al subsecretario de la Policía Preventiva, Antonio Miguel Escamilla.

¡Y no! En este espacio no sólo se denuncian acciones reprobables de funcionarios públicos, también se da cabida a las voces, en este caso, de otro segmento de agentes policiacos que saben cuál es la realidad que permea en este suceso escabroso que, por un lado, no se duda haya causado descontento de algunos comandantes y/o directores por ser instados a cooperar para que sus subordinados tuvieran una celebración digna, pero, por el otro, beneplácito de la “tropa” al saber que se busca dignificar un festejo que siempre realizaban de manera precaria y sin reconocimientos fehacientes.

Pero como en toda denuncia, siempre hay dos versiones. Y así como supuestamente policías inconformes denuncian el cobro de 1,200 pesos para festejarlos y reconocerlos, donde incluso mencionan que el alcalde José Luis Urióstegui Salgado acudirá a dicho evento para homenajearlos, también es importante destacar que dicha cantidad NO ES LA QUE ACORDARON APORTAR COMANDANTES Y DIRECTORES DE ÁREA, SINO QUE FUE UNA MUY INFERIOR A LA DENUNCIADA EN EL MEDIO DE COMUNICACIÓN Y ESTO ÚNICAMENTE FUE PARA ADQUIRIR LA COMIDA.

Se reconoce que mayormente el actuar de la policía siempre ha dejado mucho qué desear, es más, ante los ojos de la sociedad, los elementos policiacos no merecen ser festejados; siempre los acusan de corruptos, de “pedir mochada”, de prepotentes y demás calificativos que, en esta ocasión nada tiene que ver, porque, se repite, se brinda el espacio a aquellos policías que saben cuál es la realidad laboral que padecen día tras día y ¡no! No se busca ni protegerlos mucho menos justificarlos. Esto, porque, así como hay policías que manchan el uniforme con su actuar, también los hay honestos y entregados a su labor. De ahí que no se debe generalizar.

Algunos policías preventivos, que no están de acuerdo en lo que circula en las redes -puesto que ni siquiera los consultaron ni son partícipes-, señalan que la situación se ha tergiversado, que precisan que a la Policía Preventiva el alcalde José Luis Urióstegui NO LES PERMITIÓ solicitar a negocios donaran algún artículo para rifarlo entre la “tropa”, pero, SÍ LE DIO “PERMISO” AL DIRECTOR DE TRÁNSITO Y VIALIDAD, JAVIER TENCLE, PARA QUE ELEMENTOS A SU CARGO ACUDIERAN A LOS ESTABLECIMIENTOS COMERCIALES A ENTREGAR OFICIOS PARA SOLICITAR DONACIONES PARA RIFARLOS ÚNICAMENTE ENTRE POLICÍAS DE TRÁNSITO.

Luego entonces, ¿por qué el piso no es parejo? ¡o todos coludos o todos rabones!, ¿Por qué a los de Tránsito sí les permite pedir apoyos a comercios y a preventivos no? ¿por qué? Aún más porque es un secreto a voces que en los festejos de los tránsitos, ya alcoholizados hacen desmanes e incluso en alguna ocasión algún beodo politránsito sacó su arma y le apuntó a otro policía vial por supuestos problemas de “faldas”.

Además, denunciaron los quejosos, que, en la Dirección de Policía de Tránsito y Vialidad, la trabajadora sindicalizada, Laura Salgado, es conocida por realizar gestorías vehiculares en horarios de servicio, misma que es la encargada de recabar la cooperación de 500 pesos por elemento de tránsito y los comandantes ponen 1000 pesos cada que festejan “su día”.

Donde, reiteran, los regalos los donan los negocios y las empresas de grúas donan hasta motos y sólo los amigos más allegados se las ganan. Eso es lo que han denunciado algunos de los asistentes a esas reuniones y policías de tránsito, que se reitera, optaron por el anonimato por temor a represalias.

Pero, así como en otro medio de comunicación se dio a conocer la versión de que se les cobró por festejarlos, dando a entender que fue un cobro por cada elemento, también se le abre el espacio a otros policías que muestran su respaldo al subsecretario Antonio Miguel Escamilla y que a letra señala:

“Ánimo Comandante!

No estás solo….

En relación con la información difundida por un medio de comunicación, es necesario aclarar que se está generando una versión distorsionada de los hechos, intentando presentar al comandante Antonio Miguel Escamilla como una persona abusiva, cuando la realidad es completamente distinta.

El comandante Escamilla es un Comandante formado desde las filas, que conoce de primera mano el sacrificio y las carencias que han enfrentado los policías durante años.

Precisamente por eso ha impulsado que, por primera vez en mucho tiempo, el Día del Policía se realice como un evento digno, como el que toda corporación merece.

Este evento no es producto de imposiciones ni de cuotas obligatorias.

Es resultado de la colaboración voluntaria de comandantes, directores y distintos compañeros que desean ver a su corporación unida, reconocida y fortalecida.

Por eso sorprende que haya voces que se atrevan a difamar, inventar y denigrar a una persona que no ha pedido un solo peso a la tropa.

Se está atacando sin fundamento a quien ha trabajado para mejorar las condiciones de quienes todos los días salen a la calle a arriesgar la vida.

No permitan que el evento del Día del Policía se vea afectado por mentiras, rumores o intereses ajenos.

Si realmente desean “dignificar” a la policía, empiecen por permitirles celebrar su día con tranquilidad, respeto y unión.

Llama la atención que cuando otras áreas hacen sus festejos o “excesos” cada 22 de diciembre, nadie dice nada.

Pero ahora que los preventivos, quienes históricamente han sido marginados, están organizando un evento mejor y más digno, de inmediato quieren echarlo abajo.

Antes de hablar, hay que saber callar.

Y antes de señalar, hay que asegurarse de no estar ocultando lo que sí ocurre en otros espacios.

Si de verdad se quiere dignificar a los policías, entonces dignifiquen sus sueldos, sus prestaciones y sus condiciones laborales.

Porque la labor del policía no se reconoce solo un día al año:

se trabaja 24 horas, los 7 días de la semana.”.

“Presidente José Luis Urióstegui Salgado:

No buscamos defender al titular de la SEPRAC, Guillermo García Delgado; sin embargo, es justo reconocer que ha demostrado un trato humano tanto hacia sus elementos como hacia el personal administrativo. A pesar de los señalamientos que lo rodean, ha impulsado mejoras reales y visibles en las instalaciones, ha proporcionado mobiliario de calidad a sus trabajadores y ha brindado apoyo directo a todo elemento o trabajador administrativo que, con algún problema, se acerca a tocar su puerta.

Por ello, no debe echarse abajo un evento cuyo objetivo es elevar la moral de las fuerzas policiales, especialmente por intereses personales de personas ajenas a la corporación.”.

Es importante precisar que la verdad histórica de todo lo que ocurre en el interior de las corporaciones policiacas, la saben precisamente los que ahí laboran y así como a unos se les da la voz para denunciar, también a otros que no están de acuerdo se les brinda esa oportunidad para expresarse sin menoscabo.

Lo que es un hecho es que ya sean policías preventivos, de tránsito, personal de Protección Civil, Bomberos, Policía de Género, todos, absolutamente todos son garantes del pueblo de Cuernavaca y merecen un trato digno. Y que antes de dar por sentada una versión denunciada, investiguen cuál es la realidad. No deben los jefes jerárquicos, incluyendo el edil, dejarse llevar por lo que unos cuantos dicen. Que investiguen, que sean justos y parejos y, principalmente, que dejen los dimes y diretes y reconozcan a los que en verdad trabajan.

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